viernes, 13 de noviembre de 2009

Poesía Oriental

Hoy hablaré del haiku, una forma de poesía tradicional del Japón.

Surgió en el siglo XVI, y se trata de una combinación de tres versos, los cuales tienen en total 17 sílabas, siguiendo la métrica silábica 5-7-5.

Es considerado la expresión del amor por la naturaleza, por lo cual son indispensables las "palabras de estación", las cuales permiten al poeta describir la naturaleza con su permanente cambio de estaciones y su eterno comienzo de año nuevo.

Es un arte despojado, que prefiere el simbolismo a la explicación lógica, lo cual suprime los detalles y deja sólo lo esencial. Por eso podría decirse que el Haiku, con sólo 17 sílabas, contiene al universo entero.

Vale la pena notar que por lo general la rima del haiku es libre, es decir que rara vez se puede encontrar rima de tipo consonante o asonante.

A continuación, unos haikus que escribí en la clase de Lengua de hoy, y que combinan fragmentos de haikus ya escritos. Traten de descifrar su significado.

Crecen las rosas
Que alguna vez tocaba
Para el olvido
En el desierto
Acontece la aurora
Alguien lo sabe
El hombre ha muerto
No he movido las piezas
En el tablero
Bajo la Luna
Sigue trazando versos
La vieja mano

¡Saludos a todos!
Esta entrada está dedicada a la profe Morando y a Noe.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Hombres y mujeres... ¿Iguales?


Por los siglos de los siglos el hombre y la mujer han sido considerados como dos seres diferentes. En las primeras sociedades "civilizadas" (ej. Grecia Antigua) las mujeres no eran consideradas ciudadanas, y en ocasiones, ni siquiera seres humanos. No gozaban de los mismos derechos que los hombres, y no podían participar en la política.

A través de los años, se les fueron concediendo más derechos, como el del voto. Sin embargo, seguían observándose viejos prejuicios. Por ejemplo, había trabajos considerados "de hombre" y otros considerados "de mujer". Y esto continúa hasta nuestra época. Muchas veces, la mujer es objeto de discriminación. Además, aún existen las sociedades que no otorgan derechos a las mujeres.

Por eso, en tiempos recientes es cada vez más común escuchar de protestas y de organizaciones que luchan por la igualdad entre mujeres y hombres. Y debo señalar que ya se han dado pasos en camino hacia esa igualdad en cuanto a las oportunidades. Ahora, prácticamente cualquier trabajo puede ser realizado por mujeres u hombres, y en las sociedades occidentales, ambos tienen los mismos derechos.

Pero el hombre y la mujer, ¿son iguales en todo sentido? ¿Deberían ser tratados equitativamente en todo momento y circunstancias? Analicémoslo.

Ya hablamos de la igualdad en cuanto a derechos. Esta es una igualdad que debe estar presente, ya que seamos mujeres u hombres, todos somos seres humanos.

También hablamos de la igualdad de géneros en lo que respecta al campo laboral. Si bien el trato laboral debería ser equitativo, no todos los trabajos pueden ser realizados por una mujer. Aunque suene contradictivo, las mujeres y los hombres no comparten las mismas características físicas ni psiquícas, por tanto, hay trabajos que no pueden ser realizados por una mujer, así como hay otros que no pueden ser realizados por hombres. Sin embargo, la mayoría de las oportunidades laborales que podemos hallar en la actualidad pueden ser realizados por ambos.

Ahora, en cuanto a lo moral y lo social me gustaría realizar una pausa. Una compañera hace poco hizo una pregunta que me pareció curiosa: "¿Por qué a una mujer que anda con cuatro tipos a la vez le dicen de todo, mientras que a un hombre que anda con cuatro mujeres a la vez lo ven como un ganador?". La pregunta me dejó pensando. Y aunque en principio me pareció lo justo que a mujeres y hombres nos trataran por igual, después lo pensé. Es más, escuché una frase que me hizo reflexionar: "Para el hombre, el amor es una cosa aparte de su vida, mientras que para la mujer, el amor lo es todo en su vida". Otra: "A él le preocupan los hechos. A ella, los sentimientos". ¿Dan para pensar, no?

Conclusión: los hombres y las mujeres no son totalmente iguales, y no siempre deberían ser tratados de la misma manera. Tenemos diferencias a nivel físico y emocional, y son nuesras diferencias lo que nos distinguen a los unos de los otros. Lo importante es que nunca dejemos que esas diferencias nos separen, de hecho, sólo luchando unidos es que solucionaremos nuestros problemas y lograremos un mundo mejor.